La obra que rompe las marcas de tiempo de construcción, tecnología y diseño en México se encuentra en Puebla y es la torre residencial más alta del país: Nvbola.

Su nombre, inspirado en el significado de símbolo, surge precisamente porque su edificación fusiona los conceptos de altura, funcionalidad, diseño y el más alto estilo de vida; cambiando el panorama de Puebla por completo, crea un nuevo punto de referencia.

“Nvbola da orientación urbana, se distingue de todos los edificios altos construidos y nació como símbolo por su diseño, escala, tamaño y ubicación”, asegura en entrevista el arquitecto Bosco Gutiérrez Cortina, quien dirigió la remodelación del World Trade Center de la Ciudad de México.

El proceso de construcción rebasa las dimensiones de obras verticales similares. En la cimentación se utilizaron 80 pilas a más de 30 metros de profundidad, agrupadas en un mega dado del tamaño de 3 canchas de tenis, unos 9,400 metros cúbicos de concreto, el equivalente a un edificio de 11 pisos de altura.

En Nvbola, ubicada en el Distrito Sonata, la empresa mexicana Blueicon ha utilizado sofisticados sistemas que le han permitido edificar en tiempos récord. Una bomba robótica vierte el concreto; la placing boom es usada por primera vez en el país en esta obra. La torre muestra avance del 70%.

En el aspecto arquitectónico, Nvbola es única por proyectar un lobby de 11 metros de altura integrando a la torre, una alberca semiolímpica en el piso 40 –una de las 10 más altas del mundo.