/
Las fianzas juegan un papel clave dentro del sector de obras públicas y privadas, ya que reducen la incertidumbre y permiten desarrollar más infraestructura.
En 2022 las fianzas de obra representaron más del 50 por ciento del total de las fianzas administrativas y se prevé un crecimiento de entre 12 y 18 por ciento en 2023. “Esto significa que si en el país hay obra pública, entonces hay un gran mercado para la fianza”, comenta Daniel Gálvez, director Comercial de Finanzas de AVLA, grupo asegurador de origen chileno.
“Las fianzas de obra pública o de construcción son garantías que solicitan los contratantes o los dueños de una obra a sus contratistas con la finalidad de que estos cumplan cabalmente con lo estipulado en el contrato de obra que están celebrando, es decir, que cumplan con los tiempos de entrega de la construcción que se les ha encomendado y que la calidad de los materiales también corresponda con lo solicitado por el cliente, y que en caso de que no te entreguen en tiempo o los materiales no sean los adecuados o lo que solicitaron, entonces existe esta garantía para que puedan resarcir cualquier daño que se haya generado con motivo de la mala construcción o del desfasamiento de la obra que están requiriendo”, explica Gálvez.
El director Comercial de Finanzas de AVLA revela que del 100 por ciento de la prima neta que ingresan las compañías afianzadoras el 75 por ciento proviene de obras públicas y solo el 25 por ciento de obras privadas. “Por lo regular el gobierno está obligado a solicitar un tipo de garantía cuando pide la elaboración de un proyecto con recursos de orden público, en cambio, los particulares por desconocimiento son muy pocos los que piden garantizar las obras. Si compras un terreno y solicitas la construcción de una casa o edificio, le puedes solicitar una fianza al contratista, pero el desconocimiento por parte de los inversionistas hace que el producto no sea tan popular como podría ser un seguro, desconocen el tipo de fianzas y las coberturas que les puede ofertar y la tranquilidad y garantía de que su dinero va a estar protegido y de que la obra debe estar realizada bajo los parámetros de calidad que ellos establecen en el contrato”.
Menciona que la fianza se puede contratar por la totalidad de la obra, o bien, por fases del proyecto. “En obras gubernamentales, que son obras enormes, puede entrar una gama de contratistas, 10, 20, 30 o 50, y a cada uno le otorgan una fase o una área de trabajo, entonces la fianza se individualiza. La póliza de fianza se puede contratar en cualquier momento, antes de que inicie la construcción del proyecto que estás solicitando. La afianzadora analiza la experiencia técnica del contratante, su solidez financiera y que cuente con los trabajadores y maquinaria para realizar los trabajos en el sitio que lo están contratando”.
AVLA ha participado en proyectos como Agua Saludable para La Laguna de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), que se ejecuta en el Estado de Durango; en la Refinería Dos Bocas, con distintas compañías, principalmente en estructura metálica y con ensambles y adaptaciones para las distintas necesidades de la refinería, así como en los proyectos de renovación del parque vehicular de la Ciudad de México y de Monterrey, RTP y Sistema Metrorrey, respectivamente, que están migrando a unidades eléctricas.
Cabe mencionar que obras públicas como el Tren Maya, el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), Tren Transístmico y el Tren interurbano México-Toluca, entre otras obras, son respaldadas, al menos, por dos fianzas vigentes, según información de AVLA, una de las 10 empresas de seguros de garantía (fianzas) y crédito en América Latina que llegó a México en 2021.
Daniel Gálvez señala que la participación de AVLA en megaproyectos en México le ha servido para acercarse a pequeños contratistas o subcontratistas especializados que nunca habían manejado una fianza y que hoy tienen la necesidad de solicitarla. “Nos interesa llegar a las cámaras de comercio para ofrecer este tipo de garantía que no tiene tanto auge entre los particulares. En donde exista un contrato y una obligación puedes tener una fianza, grande o pequeña, hemos tenido fianzas donde garantizamos 25,000 pesos, en ocasiones es más caro pagar una prima que el importe que estás garantizando”.